EN TU VIDA, ¿QUÉ TE ATAS?
En una ocasión, alguien tomó prestado un libro que
resultaba muy interesante, pues proveía algunos principios espirituales sobre la
forma de convivencia de una pareja.
De entrada, el dueño le confesó que contenía una
dedicatoria con un significado especial y profundo para él, cuya autoría recaía
sobe la novia, quien le había obsequiado la obra.
Aconteció que, mientras la amiga leía, compartía otros
quehaceres domésticos. En un halo de dejadez, el libro quedó al alcance de un
Chihuahua, un canino conocido por su minúsculo tamaño y gran carisma, su aguda
inteligencia, pero también por su instinto destructor. Sucedió lo inesperado:
el perro desgarró y comió una sola hoja de la obra. ¿Cuál? No hay que ser
adivino. Fue LA DEDICATORIA.
Es que, por lo general, somos débiles con aquellas cosas
materiales de la cual somos esclavos. Vivimos atados, sin sentir la gran
oportunidad de experimentar la libertad. De forma inexplicable, el dedo que más
cuidamos es que resulta lesionado hasta con un accidente con el viento.
El
perro de la historia, hoy te quiere enseñar a ver la siguiente página de ese
gran libro que te fue regalado. Me
refiero al libro de tu vida. No podrás conocer el libro de tu vida en ausencia de situaciones dolorosas,
frustraciones, sufrimiento. Es ahí donde encontrarás el momento justo para empezar
a escribir la primera de muchas hojas de amor en tu corazón.
La
gran Escritora y conferenciante estadounidense, sordo ciega por demás, Helen
Adams Keller, deliberó en una ocasión: “¿Por qué contentarnos con vivir a rastras
cuando sentimos el anhelo de volar?”. Es despertando el ave que yace en ti,
y no asiéndote a la Dedicatoria, que podrás encontrar la libertad y el sentido
de vivir.
¿Fuiste llamado
siendo esclavo? No te dé cuidado; pero también, si puedes hacerte libre,
procúralo más (1 Corintios 7:21).
Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo (Gálatas 4:7).
Estad, pues, firmes
en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al
yugo de esclavitud (Gálatas 5:1).
GENNYS AZAEL LORENZO MARIÑEZ
Gennys.lorenzo@hotmail.com
REPUBLICA DOMINICANA